domingo, 17 de enero de 2010

Las Matronae

Con el término Matronae nos referimos a tríadas de diosas asociadas con la fertilidad que fueron veneradas en zonas concretas de Europa entre los siglos I y V d.C. Aunque el origen se les supone bastante más antiguo (se ha relacionado con la cultura de La Tène, II Edad del Hierro), las representaciones plásticas que conservamos de ellas proceden de esta época, ya que la expansión de este culto se vio favorecida por el crecimiento de la cultura romana. Las zonas en las que podemos encontrar restos de este culto son Germania (especialmente la zona del bajo Rhin), la Galia oriental y el norte de Italia y de la Península Ibérica.

Estas diosas aparecen de tres en tres, rodeadas de frutas y animales, y normalmente con un pecho descubierto, aludiendo también de esa manera a la maternidad. Las inscripciones que se conservan están escritas en lenguajes celtas o germánicos y muchas veces dan gracias a estas divinidades por su protección, por lo que quizá se les podría aplicar también esta característica. En ocasiones, podrían ser asimiladas también a diosas de la tierra y adquirir nombres que aludían a los localismos de las zonas en las que se les rendía culto; es por esto por lo que muchas veces es complicado discernir en las inscripciones si se habla de ellas o de otras divinidades. Encontramos también nombres de estas diosas relacionados con etnias concretas, como por ejemplo las Hiannanefaticas, a las que los cananefates rindieron culto en la actual Holanda. Además, parece ser que las representaciones tienen bastante influencia grecorromana en cuanto al estilo artístico, por lo que también surgen debates en torno a algunas representaciones cuando se trata de vislumbrar su origen en este sentido.

He observado que en muchos lugares se trata de relacionar a las matronae con tríadas de diosas que, en realidad, tienen características que no se les pueden aplicar, como por ejemplo, la diosa irlandesa Morrigu. Aquí surge un problema de interpretación bien sencillo: las matronae simbolizan la fertilidad, la tierra (entendida como territorio) y la maternidad; si bien no voy a negar que Morrigu pueda tener estos atributos, es cierto que tiene otros que la alejan definitivamente de las matronae, por lo que no debemos caer en la tentación de lo fácil, que es asegurar que las representaciones de las matronae se pueden aplicar a cualquier tríada de divinidades femeninas. Un ejemplo que sí se podría aplicar sería el caso de la tríada de diosas de la tierra de Irlanda, Eire/Bamba/Fotla, puesto que simbolizan la tierra y la fertilidad, pero tampoco podemos decir que algunas de estas representaciones puedan ser ella, puesto que, lingüísticamente hablando, no podemos relacionar las inscripciones celtas de las matronae con el gaélico irlandés.

En cuanto al origen, si observamos la cronología de las inscripciones, podríamos casi asegurar al cien por cien que es celta y que efectivamente, podría provenir de la cultura de La Tène, ya que las primeras representaciones aparecen en la Galia. De ahí, pasan al norte de Italia, y por último, a los alrededores del Rhin, relacionadas con los ubios, una tribu germana fiel a Roma. Son zonas fuertemente romanizadas así que podemos confirmar que, aunque el origen de las matronae no es romano, sí que esta civilización asumió su culto y ayudó a difundirlo. Es más, quizá, si no fuera por las inscripciones celtas y germanas, los historiadores hubieran concluido que el origen de las matronae era romano.

No hay comentarios:

Publicar un comentario