sábado, 20 de marzo de 2010

El culto a Mitra

A pesar de que cuando escuchamos la palabra "mitraísmo" nos viene a la mente un culto practicado por los soldados romanos del Imperio, lo cierto es que su origen está en Persia, donde Mitra era considerado una divinidad solar. Sabemos de su origen porque su nombre es mencionado por primera vez en un tratado entre los hititas y los mitani del año 1400 a.C. Su culto era mistérico y se basaba en organizaciones secretas y exclusivamente masculinas, con un carácter esotérico e iniciático y de transmisión oral de iniciado a iniciado; es por esto seguramente por lo que no exista un corpus escrito acerca de este culto.

El culto a Mitra se llevaba a cabo en los templos llamados mitreos, que en origen fueron cuevas naturales y más tarde pasaron a ser estructuras artificiales pero que imitaban las características de una cueva en cuanto a oscuridad y tamaño; apenas podían contener a unas 30 personas. Todos los que se han descubierto guardan relación de cercanía con instalaciones militares y cuarteles.
Conocemos el mito de Mitra por la interpretación de las imágenes encontradas en estos mitreos, ya que como he dicho anteriormente, no existen fuentes escritas acerca de este culto. Parece ser que Mitra nació cerca de un manantial sagrado, bajo un árbol y junto a una roca también sagrados. En el momento de su nacimiento llevaba el gorro frigio que lo caracteriza, un cuchillo y una antorcha. Fue adorado por pastores.
En cuanto al toro, Mitra lo encontró en las montañas y tras muchos esfuerzos por hacerse con él, lo cargó sobre su espalda y lo llevó, aún vivo, hasta su cueva. Esto se ha identificado como un tránsito de corte iniciático. Una vez en la cueva, un cuervo avisó a Mitra de que debía sacrificar al toro, lo cual ejecutó con su cuchillo. La columna vertebral del toro se convirtió en trigo, y su sangre, en vino. De su semen, surgieron elementos útiles para el hombre. Después aparecieron el resto de animales que se muestran en las representaciones: el perro, que se alimentó del trigo; el escorpión, que aferró los testículos del toro; y la serpiente. Es de notar que en las imágenes, Mitra nunca mira al toro mientras lo degüella y suele poseer compasión en sus ojos.
Existían siete niveles de iniciación, que conocemos por un texto de San Jerónimo que confirma algunas inscripciones. Serían los siguientes: corax (cuervo), cryphius (oculto), miles (soldado), leo (león), perses (persa), heliodromus (emisario del sol) y pater (padre). La mayoría no pasaban del rango de leo y sólo unos pocos privilegiados accedían al resto de grados. Durante los ritos, cada iniciado llevaba la máscara de animal correspondiente a su grado.
En cuanto a los ritos en sí, todo lo que conocemos es por escritos cristianos, por lo que podría haber datos exagerados o directamente inventados para echar por tierra este culto. En los ritos no participaban mujeres; no existía sin embargo ninguna restricción en cuanto a la edad, ya que se sabe que fueron iniciados incluso niños. Se hablaba en griego, con algunos pasajes en persa, aunque seguramente con el tiempo se fue introduciendo también el latín. Se celebraba un banquete de pan y vino en el que los Cuervos eran los sirvientes de los demás; también se sacrificaba un toro, cuya sangre pudo ser utilizada para bautismos rituales. La festividad de Mitra se celebraba en torno al solsticio de invierno y también se le honraba los domingos, considerados días del Sol.
La decadencia del mitraísmo llegó con la sincretización que el emperador Aureliano hizo de esta religión con el nuevo culto del Sol Invictus. Esto no acabó con el mitraísmo, que continuó adelante como culto no oficial, pero sí fue el comienzo de su declive, ya que los devotos comenzaron a repartirse entre ambos cultos. Después el cristianismo fue robándole adeptos también hasta que el mitraísmo junto con el resto de cultos paganos fue prohibido oficialmente en el año 391.

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viernes, 12 de marzo de 2010

Endovelico

Endovélico es el dios principal del panteón lusitano en época prerromana. Es la divinidad de la que se conservan alrededor de un centenar de inscripciones y una de las pocas que no se sincretizó completamente con ningún dios romano, aunque en contadas ocasiones se ha asimilado a Esculapio por sus dotes sanadoras. Su nombre se ha traducido de dos maneras: como "el muy bueno" o "el negro". La más aceptada es la primera, aunque la segunda también tendría sentido ya que Endovélico está altamente relacionado con el inframundo, donde fue tras ser muerto por un jabalí, animal con el que se le relaciona.

Endovélico tenía también relación con las dotes adivinatorias especialmente a través del sueño. Para esto, tenía lugar un ritual llamado incubatio que se llevaba a cabo en el templo o altar del dios, pidiéndole ayuda o consejo. El devoto dormía allí mismo y se suponía que en sueños recibía el mensaje que necesitaba. Otros autores le relacionan también con el bosque y el renacer vegetal, ya que tras su estancia en el inframundo, llevaría consigo la primavera al volver a la superficie, acompañado por su consorte la diosa Ataecina.

Se le honraba mediante el sacrificio de cerdos, debido a la asociación del dios con los jabalíes (se han encontrado exvotos en forma de jabalí en zonas de culto), aunque también ha aparecido representado por un águila en algunas aras típicamente romanas. Se le otorga un carácter solar y ctónico, por lo que se le asocia también a la mina.

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